Reforma y consolidación de antigua casa de montaña para darle una nueva vida. La intervención contemplaba un programa con 7 habitaciones, varias salas de estar, gran cocina y una piscina exterior, solárium y cocina exterior. Dentro de este programa se contemplaba también la recuperación del espacio protegido, destinado originalmente a la producción de aceite, al que se le da un nuevo uso como sala de estar con chimenea.
La estética general de la vivienda se caracteriza por un estilo rustico-contemporáneo. La utilización de la madera, barro y piedras calizas-areniscas, formas simples, espacios amplios y la formación de nuevos huecos en la fachada y cubierta para la entrada de luz en los espacios interiores de la edificación.
La zona exterior con piscina destaca por la vegetación del entorno y las vistas al valle. Su diseño y distribución vienen condicionados a este entorno. La ubicación del solárium y la cocina exterior se orientan al nord-oeste, pudiendo disfrutar tanto de las vistas, como de la puesta de sol.
Compartir en:
